Este informe semestral ofrece previsiones sobre la evolución de la economía global realizadas por los equipos de análisis macroeconómico de la red global de KPMG, que utilizan una gama de modelos externos e internos que reflejan las principales interacciones en la economía global.
Esta edición, la primera de 2023, pone de manifiesto que la contención en la escalada de los precios han permitido mejorar las previsiones sobre la evolución de la economía global y aunque las presiones inflacionistas se mantendrán en algunos mercados, es previsible que continúen descendiendo hasta alcanzar los objetivos de los bancos centrales en 2024. Los bancos centrales tienen ante sí una tarea ardua, ya que sus medidas para mitigar la inflación deberán también garantizar la estabilidad de los mercados financieros.
En este entorno complejo, la política fiscal podría consolidarse como una posible herramienta para potenciar el crecimiento. Sin embargo, las medidas adoptadas por los gobiernos durante la pandemia y las soluciones para mitigar el impacto de la inflación en hogares y empresas han elevado la deuda pública a niveles históricos, lo que reduce el margen para aplicar una política fiscal expansiva. Además, la subida de los tipos de interés ha encarecido la deuda pública, con el consiguiente impacto en las finanzas públicas.
A pesar de estos factores, la economía global se expandirá en este ejercicio por varias razones: la economía china se ha reabierto tras las restricciones vinculadas a la pandemia, la presión sobre las cadenas de suministro se está relajando y los flujos comerciales se irán recuperando progresivamente, al igual que el consumo. No obstante, las tensiones geopolíticas se mantendrán, generando incertidumbre en el mercado.
