El sector energético está en una posición única para apoyar a otros sectores.
Las compañías energéticas enfrentan su propio riesgo operacional y financiero por el cambio climático. Al mismo tiempo, tienen la oportunidad de ser líderes mundiales en la reducción de las emisiones de carbono.
Un mix de producción equilibrado será clave en los próximos años. De hecho, el 73% de los CEOs de energía encuestados aseguran que el crecimiento de su organización dependerá de su capacidad para manejar con éxito el cambio hacia una economía baja en carbono.