En entrevista con Pascal Beltrán, Olivia Segura, Socia de Asesoría en Capital Humano y Gestión del Talento de KPMG México.
El entorno geopolítico, económico y social plantea la necesidad de empresas cada vez más agiles, flexibles y diversas, manteniendo un pensamiento estratégico impulsado por la alta dirección. En ese sentido, el liderazgo femenino se ha identificado como un impulsor del cambio de prioridades, en donde se destaca el foco en la inversión en tecnología, especialmente inteligencia artificial, al ser una herramienta esencial para automatizar procesos, reducir costes y mejorar la competitividad, como lo plantea el estudio Global Female Leaders Outlook 2025 de KPMG.
Asimismo, otro tema prioritario en el liderazgo femenino es la adaptabilidad como un elemento clave para el crecimiento sostenible, dado que las empresas con una organización flexible, la capacidad de tomar decisiones rápidas y una cultura orientada al cambio tienen una mayor ventaja estructural. Lo anterior, reitera la necesidad de mejorar la igualdad de género en las organizaciones, para promover organizaciones más inclusivas y diversas que tengan una mejor resiliencia ante situaciones adversas.