En un entorno financiero altamente digitalizado, garantizar la seguridad, disponibilidad y cumplimiento normativo de los sistemas de pago representa una prioridad estratégica para las instituciones financieras en México.
Los sistemas de pagos electrónicos interbancarios (SPEI) y el sistema de pagos interbancarios en dólares (SPID) constituyen infraestructuras críticas reguladas por Banco de México (Banxico) y supervisadas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV). Cumplir con sus disposiciones no solo es una obligación legal, sino también un elemento clave para asegurar la continuidad operativa y la confianza de los usuarios.