¿Qué convierte a México un destino atractivo para la relocalización de las operaciones de manufactura y servicios?
¿Qué aspectos deben considerar las empresas antes de decidir invertir en nuestro país?
El éxito de la reubicación depende de diversos factores; tomarlos en cuenta permite obtener distintas ventajas competitivas.
El concepto nearshoring ha ganado popularidad, junto con los efectos positivos que este podría tener en economías como la de México, que se constituye como uno de los destinos más importantes y atractivos para nuevas inversiones que busquen posicionar operaciones de manufactura o servicios para entrar al mercado de América del Norte.
Se entiende como nearshoring la transferencia de toda o de una parte de la producción a destinos cercanos al centro de consumo final, en una zona horaria semejante a la de este.
En estas condiciones, la identificación y conocimiento de los requisitos de registro, tributación o financiamiento serán clave para la transición. Asimismo, la relocalización implica considerar las necesidades financieras, de recursos humanos e infraestructura, así como los objetivos de sostenibilidad.
Así pues, las organizaciones que busquen seguir con esta tendencia deberán tomar en cuenta al menos nueve aspectos relevantes.