A pesar de la incertidumbre económica, el 68% de los CEO de empresas privadas siguen confiando en las perspectivas de crecimiento de su negocio.
El informe KPMG 2024 CEO Outlook: The private company perspective ofrece una visión completa sobre las prioridades, estrategias y desafíos a los que se enfrentan los líderes de las empresas privadas de todo el mundo.
Basado en entrevistas con 376 CEO de 11 países y diversos sectores, tales como infraestructura, telecomunicaciones, seguros y gestión de activos, entre otros.
Los temas abordados incluyen avances tecnológicos, desafíos relacionados con las cadenas de suministro, temas ambientales, sociales y de gobernanza (ESG), objetivos y dificultades en el camino hacia la descarbonización, atracción y calificación del talento, fusiones y adquisiciones (M&A), y muchos otros.
A pesar de la incertidumbre económica, el 68% de los CEO de este sector sigue confiando en las perspectivas de crecimiento de su negocio, en tanto que el 45% indica que es probable que sus empresas realicen adquisiciones significativas en los próximos tres años, lo que indica un apetito por el crecimiento inorgánico.
Desafíos para los CEO de empresas privadas
Uno de los puntos que generan más preocupación para los ejecutivos es el envejecimiento de la población activa y la falta de reemplazos calificados: para el 33% de los CEO, este desafío es crítico. La transferencia de conocimientos entre los empleados y la diferencia de expectativas entre generaciones también se encuentran entre los principales factores de impacto.
La ciberseguridad es también un factor preocupante: solo el 38% de los CEO se consideran bien preparados para hacer frente a un ciberataque, lo que pone de manifiesto la necesidad de prestar mayor atención a la seguridad digital, especialmente dado el impacto de la inteligencia artificial (IA) y la mayor sofisticación de los ciberdelincuentes.
Y si bien la inteligencia artificial generativa (Gen AI) se está convirtiendo en una prioridad de inversión para el 62% de los CEO de estas empresas, su implementación también conlleva una serie de desafíos.
Por ejemplo, solo el 39% cree que sus empleados tienen las habilidades necesarias para utilizar la GenAI de manera efectiva, aunque el 57% cree que es posible capacitar a la fuerza laboral para poder aprovecharla al máximo.
La preocupación por la imagen de la empresa y el compromiso con la diversidad también son elementos destacados en la encuesta:
El 74% dice que estarían dispuestos a desinvertir en áreas rentables para mitigar el riesgo reputacional, lo que refleja una visión estratégica a largo plazo que prioriza la sostenibilidad y el impacto social;
El 73% reconoce la necesidad de promover cambios en los niveles más altos de liderazgo para lograr una mayor diversidad;
El 75% cree que la equidad de género en la alta dirección ayudaría a impulsar el crecimiento organizacional;
El 78% estaría dispuesto a invertir en el desarrollo de habilidades y el aprendizaje continuo en sus comunidades para garantizar el acceso al talento en el futuro;
El 60% de los encuestados reconoce que el progreso en diversidad e inclusión avanza muy lentamente en el mundo corporativo.
Las estrategias ESG también siguen siendo una prioridad para muchas empresas privadas, a pesar de que el 71% de los CEO han mantenido sus estrategias climáticas sin cambios durante el último año. Entre los beneficios esperados de ESG para los próximos tres años, se destacan:
El fortalecimiento de las relaciones con los clientes y el reconocimiento de la marca
La influencia en la asignación de capital, las asociaciones y la estrategias de fusiones y adquisiciones
La posibilidad de atraer la próxima generación de talentos
Los principales desafíos para alcanzar los objetivos climáticos incluyen la complejidad de descarbonizar las cadenas de suministro (32%) y la falta de habilidades técnicas para implementar soluciones (22%).
En cuanto a las estrategias para alcanzar sus metas de crecimiento, los CEO de estas empresas identificaron como las estrategias más relevantes la realización de fusiones y adquisiciones (M&A), que fueron señaladas por el 26%; el crecimiento orgánico (23%); y las alianzas estratégicas con terceros (19%).
Además, las prioridades operativas incluyen avanzar en la digitalización y la conectividad (18 %), ejecutar iniciativas ESG (16 %) y empoderar a la fuerza laboral en IA generativa (10 %).
En resumen, el informe destaca la capacidad de las empresas privadas para adaptarse rápidamente al cambio, incluso en un escenario global marcado por la incertidumbre económica y las tensiones geopolíticas.
La agilidad de las empresas privadas combinada con un enfoque centrado en la innovación, los criterios ESG y la gestión del talento, posiciona a estas organizaciones para afrontar los retos futuros y aprovechar las oportunidades.
De cara a 2025 y más allá, los directores ejecutivos de las empresas privadas reconocen que equilibrar las estrategias de crecimiento, la responsabilidad social y la tecnología será crucial para dar forma al éxito de sus organizaciones en los próximos años.
