Todo el mundo quiere hablar de i4.0. Desde conferencias y revistas sectoriales hasta los consejos de administración y las juntas de accionistas, i4.0 es un tema prioritario.

La industria 4.0 está evolucionando a grandes pasos. Hay muchas decisiones que tomar y riesgos que gestionar. A pesar de esto, son pocas las sociedades que cuentan con un plan completo para transformar sus proyectos en mejoras reales para la organización.

En este sentido, i4.0 no sólo es tener la última tecnología que requiere el negocio, ni contar con los procesos más rápidos. La clave es contar con las capacidades idóneas para poder utilizar la tecnología más adecuada y adaptar los procesos en una mejora real del negocio.

Se necesita tener una visión clara de los riesgos y oportunidades actuales. Los directivos de las compañías manufactureras deben entender las acciones que están poniendo en marcha sus homólogos y competidores para impulsar el valor y ganar ventajas competitivas.