Actualmente, los comités de auditoría se enfrentan a un entorno geopolítico cada vez más complejo, caracterizado por la evolución constante de regulaciones y normativas globales, por lo que para mantener la eficiencia, es esencial que prioricen y gestionen estos cambios mediante un monitoreo permanente.
Bajo este contexto, es crucial que el Comité cuente con una comunicación periódica con el auditor externo, la cual ayude a optimizar su funcionamiento y aporte valor al Consejo y a la Alta Dirección.