A medida que la tecnología se vuelve esencial para satisfacer las necesidades de los clientes, empleados, proveedores y otros interesados, la ciberseguridad de una organización debe construir tanto resiliencia como confianza. Además de proteger sus activos críticos y garantizar la continuidad del negocio después de un ciberataque, ¿cómo puede proteger los datos que sus partes interesadas le confían?
Si bien no existe un plan de acción de ciberseguridad “único para todos”, las estrategias de protección lideradas por el negocio necesitan estar integradas en los modelos de gobernanza, procesos operativos y cultura.
Al incorporar la ciberseguridad en el tejido de su negocio, puede proteger los activos críticos y ganar confianza. Eso significa que puede maximizar las oportunidades, permanecer resiliente, adaptarse a los riesgos y regulaciones que cambian rápidamente, y transformarse más rápido.
Las prácticas de Servicios de Ciberseguridad de KPMG aportan una perspectiva amplia de las operaciones comerciales a los servicios de ciberseguridad. Le ayudamos a mantener su agenda de protección de información a medida que sus programas de negocio y tecnología evolucionan, proporcionando una mayor visibilidad y comprensión de los riesgos cambiantes.