Este artículo destaca las predicciones de los profesionales de Corporate y M&A de la práctica de Legal Operations Transformation Services de KPMG respecto a los cambios esperados en el mercado de fusiones y adquisiciones (M&A). Asimismo, el artículo se enfoca en cómo se espera que estos cambios afecten a futuro la función jurídica y la práctica legal. Como predicciones, no pretenden garantizar ningún resultado específico.

Después de un fuerte repunte post pandemia, los mercados globales de M&A han estado tranquilos en los últimos meses, ya que las altas tasas de interés, la inflación y la incertidumbre política global continúan creando desafíos financieros y frenando el apetito por nuevas transacciones.

Si bien el volumen de transacciones puede ser reducido, la digitalización continúa avanzando con innovaciones como GenAI, que tanto las empresas como sus equipos legales están adoptando con creciente entusiasmo. Cuando los mercados de fusiones y adquisiciones finalmente se recuperen, algo que se espera ocurra antes del final de 2024, la presión y el ritmo del proceso de negociación probablemente crearán desafíos importantes para los profesionales del derecho.

¿Cómo se verá transformada la práctica legal futura por los cambios acelerados en el enfoque de M&A?

Estas son nuestras principales predicciones:

1. Los profesionales del derecho que utilizan la tecnología de forma eficaz en el proceso de negociación pueden obtener una ventaja competitiva al impulsar el ritmo y la eficiencia de las transacciones en M&A.

En todo el mundo, los acuerdos en materia de fusiones y adquisiciones continuarán acelerándose y aumentando su complejidad a medida que los avances tecnológicos y la mayor disponibilidad de datos impulsen la eficiencia y transparencia. Desde la conexión entre compradores y vendedores hasta la planificación posterior a la integración, el rol de los abogados especializados en M&A probablemente evolucione a medida que las tareas rutinarias se estandaricen y automaticen.

Con la enorme cantidad de datos que son relevantes para una reorganización internacional, los profesionales del derecho asignarán cada vez más tecnología a la realización de tareas básicas. Esto incluye escanear y producir documentos, resumir información, preparar informes y realizar un seguimiento del tiempo y los gastos.

También cambiarán el enfoque en materia de due diligence. Las herramientas tecnológicas, especialmente la inteligencia artificial generativa (GenAI), agilizará la revisión legal al ofrecer resúmenes con información confiable sobre varios temas, como pueden ser los contratos estandarizados, litigios, términos del mercado y pólizas de seguro. Dado que GenAI facilita los primeros borradores y la investigación, será necesario actualizar el conocimiento jurídico y las capacidades de revisión del abogado para garantizar resultados precisos y de calidad.

De hecho, las oportunidades que la tecnología es capaz de brindar al negocio de las fusiones y adquisiciones son tan amplias que pueden parecer abrumadoras. A medida que los acuerdos sigan acelerándose y los flujos de trabajo se adapten, será importante que los abogados comprendan que su papel en el proceso sigue siendo fundamentalmente el mismo: negociar términos sólidos, ejecutar y optimizar acuerdos de compraventa, aplicar conocimientos previos sobre acuerdos, y crear soluciones comerciales estratégicas para sus clientes.

La tecnología está diseñada para hacer que el viaje sea más rápido y sencillo, pero el destino no cambia. Los equipos legales más exitosos probablemente serán aquellos que utilicen la tecnología de manera adecuada y eficiente para brindar servicios de mayor valor agregado a sus clientes en un formato colaborativo.

2. La rápida adopción tecnológica puede ayudar a nivelar el campo de juego para los actores en los países en desarrollo.

La brecha digital entre los países desarrollados y en desarrollo seguirá reduciéndose a medida que las empresas en países como Indonesia y Vietnam omitan las tecnologías anteriores y construyan infraestructura para respaldar las contemporáneas, como GenAI, telefonía móvil, 5G, entre otros avances. La última ola de tecnología ofrece además la oportunidad para que los países en desarrollo “den un salto hacia adelante” en áreas como el desarrollo de precedentes y la realización de importantes ejercicios de due diligence.

Esto puede nivelar el campo de juego del M&A al permitir que los nuevos participantes en los mercados en desarrollo aumenten sus capacidades rápidamente y compitan en condiciones más equitativas contra inversionistas establecidos y compradores estratégicos en mercados más desarrollados. La velocidad de desarrollo requerirá de esfuerzo y vigilancia adicionales en áreas como la formación, el uso ético de la IA y la ciberseguridad.

3. La proliferación de las normas ESG requerirá de un due diligence más detallado y acceso a volúmenes significativos de datos no reportados anteriormente.

Las nuevas regulaciones que afectarán los informes ambientales, sociales y de gobierno corporativo entrarán en vigor en Europa, y es probable que se adopten reglas similares en Asia-Pacífico y otras regiones. Esto ampliará seguramente y en gran medida el nivel de due diligence y de datos que los compradores potenciales necesitarán gestionar para cumplir con los nuevos requisitos de cumplimiento, así como de presentación de informes y otros.

Si bien está previsto que estas reglas entren en vigor dentro de algunos años, las empresas deberían desarrollar sistemas para rastrear la información relevante necesaria para futuros acuerdos. Esta no será una tarea fácil, ya que las empresas tendrán que proporcionar información detallada y, potencialmente, obtener garantía externa en temas sobre los que quizás nunca hayan informado. Cumplir con las reglas y abrir nuevas ventanas de transparencia en la empresa adquirida también puede provocar cambios en las operaciones, la estructura y la cadena de suministro de un objetivo.

De manera similar, los abogados especializados en transacciones deberán considerar qué diligencia se debe realizar para evaluar la madurez de las empresas objetivo, y así cumplir con las obligaciones y las representaciones, garantías y convenios asociados que brinden las protecciones contractuales que respalden la diligencia.

4. La evolución de las normas fiscales complicará las estructuras internacionales, la planificación y las due diligence internacionales.

Después de la pandemia, la escalada de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y los conflictos geopolíticos más recientes en Europa, Medio Oriente y otras zonas han provocado que muchas empresas internacionales reconsideren la ubicación de sus operaciones y cadenas de suministro.

Al mismo tiempo, muchas jurisdicciones están implementando las normas tributarias internacionales desarrolladas por los países miembros del Marco Inclusivo de la OCDE. Comúnmente conocidas como BEPS 2.0, el marco de reglas de dos pilares reasignará una parte de las ganancias corporativas a jurisdicciones de mercado (pilar uno), e impondrá un impuesto mínimo para garantizar que las ganancias corporativas se graven a un mínimo del 15 por ciento.

En vista de estas nuevas reglas, muchas empresas e inversores internacionales están racionalizando sus filiales y participaciones para minimizar la complejidad y la exposición fiscal. Se está prestando más atención a la ubicación de los impulsores de valor de sus negocios. La creciente transparencia fiscal bajo las reglas de presentación de informes de BEPS 2.0 también está influyendo en la estructura de las transacciones de fusiones y adquisiciones, y algunos compradores buscan separar actividades, entidades o geografías de los acuerdos para aislar el negocio principal u obtener indemnizaciones sólidas en torno a las posibles responsabilidades que puedan surgir con el negocio objetivo.

Los equipos legales estarán muy ocupados lidiando con el impacto de estas nuevas reglas a medida que las jurisdicciones establezcan diferentes fechas de vigencia e impongan sus propias variaciones de “puertos seguros” y otros aspectos del paquete BEPS 2.0. Durante este período de implementación, será particularmente importante que los equipos de due diligence se complementen con profesionales fiscales para poder identificar y asesorarse en áreas de especialidad como impuestos corporativos internacionales, precios de transferencia e impuestos indirectos.

5. A medida que el equilibrio se desplaza hacia Asia y los países en desarrollo, los equipos legales necesitarán más diversidad lingüística y cultural para prosperar en todos los mercados de M&A.

La práctica jurídica seguirá volviéndose más universal. Debido al dominio histórico y creciente de las firmas legales estadounidenses en los mercados globales, es probable que el inglés continúe siendo el lenguaje legal común y los conceptos arraigados en el derecho consuetudinario seguirán dominando la capacitación, la negociación de acuerdos y las transacciones. Pero los equipos legales del futuro necesitarán incluir profesionales jurídicos con habilidades y experiencia para comprender y gestionar las diferencias entre la legislación estadounidense y la de otras jurisdicciones, como el Reino Unido, Malasia y otros países de la Commonwealth.

Además, los flujos de capital provenientes por fuera de los actores históricamente más grandes tienden a ser mucho más complejos y difíciles de aprovechar que antes, ya que ahora hay grandes empresas, bancos y fondos que realizan negocios en una mayor variedad de países. Por ejemplo, las grandes corporaciones indias están realizando adquisiciones en países como Brasil e Indonesia; las empresas malasias están realizando adquisiciones en Turquía y otras partes del mundo. Esto no es nuevo, pero a medida que aumenta el número de economías que aportan capital saliente, o que los bancos locales financian acuerdos más grandes (y no dependen de bancos estadounidenses, europeos, japoneses o chinos), se agudiza la necesidad de hacer las cosas de manera diferente. Para capturar los flujos globales de las transacciones en M&A, se hace cada vez más necesario tener relaciones con una gama más amplia de centros de negocios, con abogados senior que puedan construir relaciones y ejecutar esas transacciones.

Esto será particularmente importante en la región de ASEAN (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático). Dada la amplia diversidad de culturas y fundamentos legales de la región, es posible que los equipos legales deban estar compuestos por abogados que puedan brindar asesoramiento, revisar documentos, negociar términos y navegar las diferencias culturales para lidiar con transacciones salientes, y especialmente entrantes, que involucren jurisdicciones tan dispares como China, Japón, Taiwán e India.

6. A medida que los ciclos de acuerdos se estrechan, los equipos legales necesitarán sólidas habilidades de gestión de la información para cerrar acuerdos rápidamente y, al mismo tiempo, mitigar el riesgo.

La velocidad es vital para un trabajo de due diligence competitivo, pero a medida que aumenta el ritmo de los acuerdos, la gestión de riesgos y los controles serán aún más importantes. Por ejemplo, en una industria regulada, o cuando una o ambas partes involucradas son empresas públicas, el proceso de due diligence puede involucrar a 100 o más personas. Más allá de los profesionales legales, las transacciones también pueden necesitar de la revisión y el aporte de consultores bancarios, financieros, fiscales, en ESG, TI y otras especialidades.

A cada individuo se le debe asignar el nivel adecuado de acceso a diferentes capas de información, gran parte de ella privada o confidencial. La seguridad de los datos es una gran preocupación, ya que las filtraciones involuntarias podrían crear problemas para preservar los privilegios, exponer información confidencial y perjudicar las negociaciones.

Además, a medida que la tecnología automatiza muchas de las tareas comunes y de nivel inferior de las due diligences, las partes interesadas con nivel junior en bancos de inversión y aseguradoras pueden carecer de la experiencia o la capacitación que necesitan para reconocer y gestionar adecuadamente la información confidencial.

Por lo tanto, a futuro, la due diligence requerirá de una gestión sólida de la información y los equipos legales liderarán cada vez más ese proceso. Esto probablemente incluirá:

  • Decidir quién necesita acceso a qué información
  • Coordinar el trabajo de los especialistas
  • Sensibilizar a los participantes sobre cuestiones de confidencialidad, privilegios legales y seguridad cibernética.
  • Sintetizar información clave para los tomadores de decisiones
  • Mantener altos estándares de gestión de riesgos.

Las habilidades en gestión de la información pueden permitir a los equipos legales mantener un flujo rápido de documentos y, al mismo tiempo, mitigar los riesgos de confidencialidad, regulatorios y de otros tipos. Las habilidades de comunicación y relaciones con las partes interesadas también serán clave.

Conclusión

A medida que evoluciona el mundo del M&A, la profesión legal tiene la gran oportunidad de utilizar nuevas tecnologías y enfoques para mejorar el flujo de las transacciones y los resultados de los clientes. Sin embargo, los abogados también deben ser conscientes de que estas nuevas tecnologías y enfoques requieren también de un nuevo conjunto de habilidades. Los abogados que sean capaces de responder rápidamente a las actitudes globales cambiantes, un mayor uso de la IA y las nuevas regulaciones probablemente podrán obtener una ventaja sustancial tanto para sus equipos como clientes.


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