Nuestras compañías operan en Argentina, Uruguay y los Países Bajos, desde donde nuestros productos se exportan a todo el mundo.
La mayoría de nuestros negocios se encuentran al comienzo de la cadena de valor alimentaria. Los excelentes suelos de Argentina y Uruguay, su clima favorable y nuestra gente, con el respaldo de la tecnología más avanzada, ayudan a producir nuestras uvas, nueces y cultivos, y a criar nuestro ganado, y estos productos son exportados a todo el mundo. Salentein es una empresa típica del Río de la Plata, combinada con el espíritu comercial holandés de sus dueños.
Es propiedad de la familia desde que se fundó hace 27 años y siempre hemos invertido en la realización de la visión de Salentein: Abastecer a nuestros clientes y consumidores con vinos e ingredientes de la más alta calidad, a la vez que preservamos nuestras tierras en forma sostenible. Nuestra tierra, nuestras marcas y nuestra gente son las tres fuentes de valor principales de Salentein.
Al ser una empresa familiar con fuentes de financiación apropiadas, es posible centrarse en el mediano y largo plazo, incluso en un país volátil como Argentina, y prosperar para la sostenibilidad en todos los aspectos. Si queremos continuar cosechando lo que la naturaleza nos ofrece, debemos cuidar los recursos naturales con los que estamos orgullosos de trabajar. Los consumidores de todo el mundo son muy conscientes de los problemas que afectan al planeta y esperan que las empresas asuman la responsabilidad que les cabe al respecto. Además, los consumidores son más conscientes que nunca de su salud mental y física. Por lo tanto, exigen cada vez más seguridad alimentaria, trazabilidad, productos saludables, alimentos no modificados genéticamente, uso responsable de los suelos, reducción de la huella de carbono y uso del agua, etc. Para comprometerse con el consumidor, este tipo de exigencias deben ser certificadas, y al mismo tiempo los consumidores desean disfrutar una experiencia de alta calidad. Salentein trabaja continuamente para inspirar confianza entre los consumidores, cumpliendo con los más altos estándares, y para reducir nuestro impacto ambiental. Nuestro constante desafío es estar al día con las exigencias cada vez mayores de nuestros clientes y de las entidades internacionales mediante el incremento y la renovación de nuestras certificaciones internacionales.
La sostenibilidad también implica tener un modelo de negocios económicamente sostenible. La cadena de valor alimentaria tiene un grado relativamente alto de comoditización, sobre todo las actividades que se desarrollan en países como Argentina y Uruguay. Elegimos diferenciar nuestra cartera de productos y crear valor a través de nuestras marcas y mediante la cooperación e integración en la cadena de valor. Las marcas se crean mediante el cumplimiento constante de las expectativas de los clientes y consumidores en todos los aspectos, incluso en el caso de productos que normalmente se consideran commodities (o semi commodities), como cultivos o ganado. Por ejemplo, nuestros clientes reconocen a nuestro ganado y maíz y semillas que no han sido genéticamente modificados como productos específicos de Salentein debido a su calidad uniforme y sus características que los diferencian, lo que nos permite cobrar un precio superior. Nuestros vinos y nuestros excelentes suelos ("terroir") son cada vez más reconocidos y premiados por su calidad por los periodistas y consumidores de vino más prestigiosos del mundo. Construir esta percepción positiva de nuestra marca requiere una visión a largo plazo y relaciones cercanas y cooperación con nuestros clientes y otros socios de la cadena de valor como expertos en nutrición, especialistas en suelos, una empresa de genética de ganado, nuestros importadores en más de 50 países del mundo, nuestros viticultores, empresas de semillas, empresas de agrotecnología, etc. El uso creciente de la tecnología de la información y la aplicación de agricultura de precisión nos ayuda a ser competitivos en materia de costos. Mediante la creación de una red confiable y especializada en nuestras cadenas de valor podemos concentrar nuestros recursos en invertir en nuestras tierras, marcas y personas.
Nuestra gente forma el corazón y la mente de Salentein. Solo aplicando sus conocimientos y experiencia podemos competir e innovar. El conocimiento profundo de algo tangible como nuestros suelos crea posibilidades ilimitadas para obtener productos de calidad. Desarrollar algo usando la naturaleza y la tecnología de manera sostenible tiene un enorme potencial de realización personal y genera pasión para las personas que trabajan en Salentein. La capacitación continua para aprender sobre las últimas tecnologías y prácticas es esencial para liberar ese potencial. Creemos sinceramente que las generaciones más grandes y más jóvenes aprecian esta clase de entorno laboral.
A pesar de la volatilidad macroeconómica en Argentina, nuestra perspectiva para todas nuestras actividades es positiva y Salentein sigue invirtiendo en expansión, tecnología, nuestras marcas y nuestra gente. Contar con diferentes actividades siempre proporciona una diversificación de riesgos.
La información aquí contenida es de naturaleza general y no tiene el propósito de abordar las circunstancias de ningún individuo o entidad en particular. Aunque procuramos proveer información correcta y oportuna, no puede haber garantía de que dicha información sea correcta en la fecha que se reciba o que continuará siendo correcta en el futuro. No se deben tomar medidas en base a dicha información sin el debido asesoramiento profesional después de un estudio detallado de la situación en particular.
Las visiones y opiniones expresadas en este informe pertenecen a los entrevistados y encuestados y no necesariamente representan las visiones y opiniones de KPMG Argentina o cualquier firma miembro de KPMG. La participación de KPMG no implica una recomendación, un patrocinio o respaldo implícito de los productos o servicios de ninguna compañía.