La globalización ha entrado en una nueva fase donde se están creando retos nunca antes vistos para el cumplimiento.
Desde KPMG hemos preparado el siguiente estudio para conocer cómo el sector empresarial venezolano ve la cultura ética, compliance y buen gobierno corporativo dentro de sus organizaciones, a fin de tener una visión más directa del grado de madurez que tienen las empresas venezolanas en cuanto al Compliance Corporativo se refiere. Dicho estudio tuvo por objetivo despertar el interés de los encuestados en contar con un programa de compliance para identificar y gestionar los riesgos operativos y legales a los que se enfrentan en su actividad. Esto con el fin de establecer mecanismos de prevención, gestión, control y reacción frente a los mismo.
El compliance invita a las empresas a establecer procesos internos para prevenir delitos, sirviendo como un escudo protector para las empresas ante la posibilidad de ser objeto de sanciones.
El objetivo del compliance es la prevención de casos relacionados con corrupción, fraude, legitimación de capitales y demás delitos conexos, mediante una serie de mecanismos que forjan un buen gobierno corporativo y una cultura ética que fortalece los controles internos de la entidad.
Nuestra encuesta de cultura ética, compliance y buen gobierno corporativo tuvo como finalidad conocer la visión sobre estos tres tópicos que actualmente prevalecen en las empresas venezolanas. Asimismo, despertar el interés de los encuestados en contar con un programa de compliance como herramienta para identificar y gestionar los riesgos operativos y legales a los que se enfrentan las entidades venezolanas en su actividad.
Resultados clave
La seguridad cibernética representa un escudo de protección que va más allá de la tecnología de la información.
Una sólida estrategia cibernética permite resguardar uno de nuestros activos más valiosos en el mundo empresarial: los datos. El hecho de implementar estrategias en torno a la seguridad digital de forma efectiva puede traducirse en una mejora de la reputación de la marca, el cumplimiento normativo, las operaciones, la confianza del equipo de trabajo y más.
Para el óptimo funcionamiento de un sistema en materia de seguridad digital, se requieren controles operativos que aseguren su correcta gestión y desarrollo.
