Por: Andrés Aldama, Socio de Asesoría en Estrategias y Procesos de Transformación Tecnológica (CIO Advisory), y Alain Gómez, Gerente Senior de CIO Advisory de KPMG en MéxicoSobre el estudio

Hoy, como nunca en la historia reciente, existe la posibilidad de crear valor en las organizaciones gracias al enorme proceso evolutivo de la tecnología y los mecanismos digitales existentes, que aceleran vertiginosamente la generación de nuevas y mejores formas de incrementar el valor, tanto a los procesos como a los productos finales, mediante el uso de múltiples herramientas tecnológicas. Para lograrlo de la mejor forma posible, la función de Chief Technology Officer (CTO) es una pieza clave.

Las empresas que ya han iniciado el camino hacia su transformación digital, así como las que no lo han hecho, tienen muy presente que esto es un paso ineludible, si es que desean subsistir en el mercado, caracterizado por  un entorno cada día más volátil y prioritariamente centrado en el cliente. Cada día más negocios destinan importantes recursos en tecnología y transformación digital, ejecutando estrategias que optimicen su forma de trabajo y les permitan reposicionarse como líderes en su sector. Pero la pregunta obligada es: ¿cuáles son los principales elementos que deben considerar las empresas para enfrentar un proceso de transformación digital eficaz? Desde nuestra perspectiva, existen 10 aspectos clave que en los que la participación del CTO es crucial para enfrentar exitosamente la transformación digital.

 

1. Fuerza de trabajo orientada a objetivos

Muchas organizaciones sufren rezagos importantes para atender las exigencias de actuales, debido a métodos de trabajo desfazados, como operar en áreas muy independientes entre sí, que no cuentan con objetivos unificados. Ante esto, las empresas deben contar con una visión integral, orgánica, que permita integrar talentos y habilidades mediante un análisis franco de las capacidades del equipo de Tecnologías de la Información (TI), con la mira puesta en desarrollar una estrategia de transformación del talento, que incluya capacitación para el personal y que promueva una cultura digital dentro y fuera del negocio. El equipo de TI puede conducir a la empresa hacia este objetivo de integración y capacitación en forma estandarizada y eficaz.

 

2. Modelo operativo centrado en el producto

Los departamentos de TI suelen operar bajo un modelo centrado en características específicas, en el cual, las prioridades se basan en incentivos en términos de tiempo, costo y alcance; sin embargo, el CTO debe buscar un modelo centrado en el producto, que permita alinear la implementación de la tecnología con los objetivos del negocio, con el propósito de mejorar la capacidad en términos de experiencia en el diseño, presupuesto e incrementar el valor del producto final y al cliente.

 

3. Arquitectura empresarial de vanguardia

La arquitectura empresarial es el arte y la ciencia de diseñar una evolución continua de la empresa digital, enfocada en la generación de resultados positivos para la organización a través de la implementación tecnológica. El CTO debe estar totalmente involucrado con la empresa, especialmente en el tema de las inversiones de transformación digital, convencer a los tomadores de decisiones de sus múltiples ventajas, demostrar que permitirán cambiar de forma rápida la respuesta a los requerimientos del negocio; además tiene la responsabilidad de entregar una arquitectura empresarial que provea capacidades de autoservicio, para que los usuarios finales puedan obtener más valor en el producto final, al mismo tiempo que dinamiza los procesos de la organización.

 

4. Modelo de seguridad de “confianza cero”

En un mundo donde clientes, empleados, socios de negocio y proveedores requieren acceso desde prácticamente cualquier lugar a las aplicaciones empresariales, mantener la seguridad de la organización y de los aplicativos de trabajo se vuelve uno de los retos más importantes. Caer en una vulnerabilidad de seguridad puede costar millones de dólares en unos cuantos minutos, generar daños reputacionales y de credibilidad imprevisibles. Bajo este escenario, el CTO debe migrar hacia modelos de seguridad de “confianza cero”, que se basan en la idea de que no es posible ni factible confiar en nada desde el interior o exterior a la organización sin que sea verificado, alineando los requerimientos de cumplimiento, desde una perspectiva integral.

 

5. Servicios administrados basados en el valor

En el modelo de servicios administrados, el CTO debe asegurarse de que los proveedores de servicios administrados de TI (managed service provider o MSP) cuenten con habilidades y capacidades para que garanticen los objetivos y misión de TI. Los proveedores deben poner la misma atención a sus contratos que a enfocarse en mejorar los procesos internos de cara al cliente, porque un CTO verá allá más de niveles de servicio y mecanismos de costeo, pondrá la mira en los mecanismos para establecer una sociedad enfocada en la fórmula ganar-ganar, integrando a los proveedores en las estrategias de negocio y equipos integrados centrados en el producto, es decir, compartir la misma visión y compromisos a corto, mediano y largo plazo.

 

6. Innovación y entrega de software de vanguardia

Los cambios en los patrones de consumo en los últimos años han ocasionado que las empresas empleen una cantidad importante de recursos para ser más ágiles y lograr posicionar nuevos productos, con un sentido de urgencia cada vez más demandante. La realidad es que, desde la perspectiva de TI, el desarrollo e integración de nuevas soluciones toma semanas o meses, debido a que los modelos operativos están basados en sistemas legados (es decir, programas o software que fueron creados hace tiempo y son difíciles de actualizar) que frenan y no permiten optimizar los procesos de las empresas a una velocidad óptima.

El CTO puede ayudar a la organización a construir y liberar sistemas utilizando prácticas DevSecOps, que desarrollen software de alta calidad al menor costo y tiempo posible, a través de iteraciones (los llamados loops o bucles de instrucciones, que son precisamente eso, indicaciones que se repiten dentro de un código o sistema) bien orquestadas, de planeación, ejecución y entrega. Esto brinda la posibilidad de crear un programa de transformación integral, que sincronice las interdependencias e integraciones con el resto de los esfuerzos y permita refactorizar o rediseñar la tecnología legada y obsoleta hacia ecosistemas tecnológicos basados en la automatización.

 

7. Estrategia de TI centrada en la nube

Cloud es la tendencia arquitectónica y la base para una organización de información centrada en el producto. Implementar la tecnología de cloud de forma correcta requiere hacer frente al rezago tecnológico, así como a sistemas y aplicaciones legadas mediante una compleja cirugía de precisión de estos sistemas. Para que el CTO cuente con una estrategia de TI centrada en la nube, debe apostar por alguno de los tres principales tipos de servicios de cloud computing, al SaaS, (software como servicio), al PaaS (plataforma como servicio), o al IaaS (infraestructura como servicio). De igual manera, es muy importante contar con proveedores que tengan ecosistemas disruptivos de servicio, así como repensar las plataformas de datos y de integración, con la finalidad de llevarlas a coexistir de manera unificada y escalable gracias a la tecnología cloud computing.

 

8. Operaciones de TI de última generación

Muchas de las organizaciones trabajan en una estrategia dual, en la cual soportan tecnologías legadas u obsoletas y cloud como dos bloques separados. La experiencia indica que este tipo de estrategias no son sustentables y fallan al transitar a un enfoque híbrido, generando riesgos a lo largo de la arquitectura de la información. Para facilitar el cambio a un modelo híbrido de TI, el CTO debe tomar ventaja de cada tipo de tecnologías, utilizando cloud para la administración de plataformas on premise, buscando integrar tecnología que genere automatización y tratar los datos como activos, todo con el fin de mejorar la confianza de los clientes.

 

9. Empresa basada en datos

Los negocios están inundados de datos, pero no logran extraer el valor real de ellos porque en muchos casos no cuentan con un lenguaje homologado de datos entre proveedores, distribuidores y clientes. El uso de diferentes fuentes de información y aplicaciones genera brechas de información, especialmente en terminologías para identificar partes, productos y transacciones, haciendo prácticamente imposible analizar y compartir datos a gran escala de forma eficiente; una empresa orientada a los datos, en contraste, cuenta con un lenguaje de datos común. El CTO es responsable, en conjunto con los dueños de los datos y el CDO (Chief Data Officer) de definir, desarrollar y mantener la columna vertebral de la tecnología de datos, con el fin de que, una vez homologados, adquieran el valor real que pueden dar a la organización.

 

10. Ecosistema de tecnología resiliente y modelo operativo ágil

Diversos factores han empujado a las empresas a la llamada resiliencia digital como uno de los componentes fundamentales de la agenda corporativa de los últimos dos años: la pandemia, disrupción en la cadena de suministro, la proliferación del ransomware, cambios climáticos y conflictos geopolíticos. Esto ha generado la necesidad en muchas organizaciones de construir bloques tecnológicos y modelos operativos más resistentes. El CTO es capaz de construir este enfoque resiliente, identificando los riesgos y brechas del negocio, así como las capacidades actuales de la organización para, posteriormente, desarrollar una estrategia que reduzca a niveles aceptables los riesgos derivados de los cambios globales.

 

La transformación tecnológica en las empresas debe traducirse en valor

Con todo lo mencionado anteriormente, queremos hacer énfasis en la importancia que tiene el CTO dentro de las organizaciones, ya que puede apalancar al negocio mediante la innovación y transformación digital, para permitir que la empresa alcance los resultados planeados de una forma resiliente, automatizada y con el uso de tecnologías de vanguardia. El reto del CTO debe ir más allá de realizar un cambio tecnológico, será responsable de desarrollar e integrar talento que sea capaz de responder tanto a la organización como al mercado, e impulse la materialización de una visión orientada en aumentar el valor del producto y la satisfacción del cliente.

Nota: las ideas y opiniones expresadas en este escrito son de quienes firman el artículo y no necesariamente representan las ideas y opiniones de KPMG en México.

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