El 80% de las empresas europeas de automoción es optimista sobre la rentabilidad a cinco años

Las perspectivas de rentabilidad de negocio en Europa en los próximos 5 años son positivas para un 80% de los encuestados.

Las perspectivas de rentabilidad de negocio en Europa en los próximos 5 años son buenas.

23 Global Automotive Executive Survey

Las perspectivas de rentabilidad de negocio en Europa en los próximos 5 años son positivas para un 80% de los encuestados, casi el doble que en la edición anterior, según el 23º Global Automotive Executive Survey 2022 (GAES), realizado por KPMG a partir de las respuestas de los ejecutivos de la industria automovilística y de sectores adyacentes en Europa. Este mayor optimismo está relacionado con una progresiva remisión de las consecuencias del Covid-19 y de la crisis de semiconductores.

No obstante, muestran más cautela respecto a los resultados a corto plazo, teniendo en cuenta el contexto macroeconómico actual. Así, un 75% de los encuestados creen que en 2023 su negocio se verá afectado por los elevados tipos de interés, los precios de la energía y la tasa de inflación.

“La visión de futuro y de innovación constante con la que trabaja la industria de la automoción es la que le ha permitido afrontar los retos a los que viene enfrentándose en los últimos años. Este sector, especialmente en España, ya ha demostrado en el pasado su resiliencia y su capacidad de adaptación a situaciones adversas lo que nos permite afirmar que se enfrentará con éxito a los desafíos y oportunidades que se recogen en el informe. Los nuevos sistemas de propulsión, el cumplimiento de los criterios de sostenibilidad, los nuevos modelos de negocio, la relación con los consumidores etc. Si nuestro objetivo como país es no solo preservar nuestras capacidades productivas y empleo actuales sino posicionarnos en el nuevo ecosistema de movilidad, es necesaria la involucración de todos los agentes implicados y en el que la Administración tiene la responsabilidad de facilitar dicha transformación”, indica Begoña Cristeto, socia responsable de Automoción e Industria de KPMG en España.

Según los datos del informe, entre las cuestiones más relevantes para la industria de automoción europea se encuentran el abordar la normativa de emisiones y la legislación ESG para el cumplimiento del objetivo net zero de la UE en 2050, así como la prohibición de comercializar vehículos de gasolina y diésel a partir de 2035. Los fabricantes europeos están enfocándose en el aumento de producción de vehículos eléctricos, ampliar la infraestructura de recarga y dar un impulso a la economía circular para vehículos y baterías al final de su vida útil.

Perspectivas de ventas de vehículos eléctricos

Los ejecutivos europeos encuestados esperan que las ventas de vehículos nuevos eléctricos (VE), excluyendo híbridos, en Europa se sitúen en el 24% hasta 2030, reduciéndose considerablemente respecto a las previsiones de hace un año. Estas expectativas son decrecientes en todas las regiones y países analizados, especialmente en India y Brasil.

Por otra parte, 6 de cada 10 ejecutivos europeos se muestran confiados en que los precios de los vehículos eléctricos se equipararán a los de combustión interna antes de 2030.

En todo caso, el 77% prevé una amplia adopción del vehículo eléctrico sin apoyo gubernamental. Estos datos ponen de manifiesto la confianza de los fabricantes, distribuidores y comercializadores de BEV, de contar con el apoyo del ecosistema que se está desarrollando a través de alianzas estratégicas y que les hará depender en menor medida de los gobiernos nacionales. Viene igualmente respaldado por la opinión de un 70% de los ejecutivos a nivel global que creen que las cuestiones cero emisiones/movilidad sostenible serán muy o extremadamente importantes en las decisiones de compra de un automóvil en los próximos 5 años.

Infraestructura de carga

La distribución insuficiente e irregular de la infraestructura de carga se apunta por los encuestados europeos como un hándicap importante para soportar los objetivos de crecimiento del VE en Europa. El hogar y las estaciones de carga públicas o privadas siguen siendo los lugares más destacados por los encuestados para la recarga de sus vehículos, si bien el lugar de trabajo o la recarga en suelo público urbano crecen respecto a hace un año.

Se observa un mayor realismo respecto a la tecnología de carga disponible, con 3 de cada 5 encuestados dispuestos a esperas por encima de los 30 minutos. Sin embargo, a pesar de que el mundo se está moviendo hacia opciones de carga más rápida que permitan evitar largas colas, la infraestructura de carga rápida pública disponible en Europa apenas ha crecido en el último año. Respecto a quien operará las estaciones públicas de carga, no parece existir un consenso entre los ejecutivos del sector, si bien las compañías eléctricas aparecen mejor posicionadas. 

Cadenas de suministro vulnerables

Para el 55% de los directivos europeos la volatilidad de los precios de las materias primas sigue siendo una gran preocupación. Para hacer frente a este problema, se muestran dispuestos a ejercer un mayor control sobre sus cadenas de suministro a través estrategias como la mejora de su cobertura financiera; el aumento de sus inversiones directas en proveedores o nuevas joint ventures; y a través de acumulación de inventario o relocalización de la producción.

El aprovisionamiento local de materias primas, especialmente en el caso de las baterías, se apunta como un factor prioritario a la hora de abordar estos riesgos para los ejecutivos europeos. En el mismo sentido, las barreras comerciales en forma de aranceles o la creciente complejidad regulatoria, son cuestiones que están afectando en las estrategias de aprovisionamiento del sector.

En cuanto a la escasez de mano de obra, el 42% de los directivos europeos expresa su inquietud y preocupación en la encuesta, una percepción más moderada que en el conjunto global (50%).

Acerca del estudio

KPMG realizó una encuesta a 915 ejecutivos de las industrias automotriz y adyacentes en octubre de 2022. Respondieron a la encuesta 207 primeros ejecutivos, junto con otros 209 altos ejecutivos, 293 jefes de unidades comerciales y departamentos, y 205 gerentes de unidades de negocio. El quince por ciento trabaja para fabricantes de automóviles y el 15% para proveedores de nivel 1. El dieciséis por ciento está empleado por empresas de tecnología de la información y la comunicación.

Trescientos cincuenta y uno trabajan en empresas con ingresos anuales de más de mil millones de dólares. Los dos países con el mayor número de respuestas son EE. UU. (28 %) y China (17 %). Europa tiene el 29 por ciento de los encuestados.