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Por:
Fernando Gamboa
Socio líder de la industria de Consumo y Retail de KPMG en Brasil y América del Sur.


La agenda ESG (de criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo, por sus siglas en inglés o, en español, ASG) ha avanzado a un ritmo sin precedentes en la mayoría de los sectores e industrias en todo el mundo. La comprensión, cada vez más profunda, del impacto positivo de estos factores en la productividad y el desempeño económico-financiero de las empresas ya no es un secreto a voces o un supuesto, sino una realidad. Hace tan solo algunos años, la agenda era impulsada bajo una premisa sustentada únicamente en que “era lo mejor para todos y nuestro planeta”, un lema que, si bien ayudó a instalar el tema en las discusiones corporativas, casi en en paralelo a las preocupaciones globales acerca del cambio climático y/o la necesidad de ser más diversos y equitativos en el entorno laboral, no era del todo suficiente. Sin embargo, el incremento constante de la demanda social por incorporar estos elementos en la estrategia misma de las organizaciones como una marca de agua de todo aquello que ésta hace y decide, se ha tornado ineludible hasta el punto de ser necesarios para financiarse, emplear y retener nuevos talentos, relacionarse con proveedores, vender productos y servicios, o mantener la lealtad de sus clientes.

Esta nueva realidad ha quedado reflejada en casi todos los estudios cuyos resultados están basados en las opiniones de los líderes empresariales, como es el caso de la más reciente edición de la reconocida encuesta global de KPMG, KPMG CEO Outlook1, y los recortes específicos elaborados para cada sector; en cuyos informes quedan plasmados tanto las perspectivas como los obstáculos y riesgos que los ejecutivos de grandes empresas ven para los próximos tres años, incluidas las cuestiones relacionadas a ESG. En el referido a la industria del consumo y retail (C&R)2, por ejemplo, que incluye al sector supermercadista, el 74% de los líderes de las principales empresas del sector a nivel global señalaron que los principios ESG están completamente integrados a sus negocios, así como la necesidad de dominar estos criterios como parte integral de sus operaciones y estrategias bajo el objetivo de generar confianza pública, mejorar la reputación y crear una base sólida de clientes.

1. KPMG. KPMG 2024 CEO Outlook. KPMG International. 2024. 
2. KPMG. KPMG 2024 Consumer and Retail CEO Outlook. KPMG International. 2024. 


El estudio destacó, entre otras iniciativas, la gestión de los residuos, la reducción de las emisiones contaminantes y la eficiencia hídrica y energética como decisiones específicas para abordar las cuestiones ambientales y el cambio climático.


Mas precisamente, y con un enfoque orientado exclusivamente al supermercadismo local, la Asociación Brasilera de Supermercados (ABRAS) y KPMG3 pudieron determinar mediante una encuesta realizada a 1.250 empresas minoristas de ese país las acciones concretas que el sector debe llevar adelante para alcanzar los objetivos clasificados como prioritarios en materia ambiental, social y de gobernanza (ligados a los 17 Objetivos Globales de Desarrollo Sustentable de las Naciones Unidas, u ODS), así como las métricas para medir su desempeño y progreso. De ese modo, el estudio destacó, entre otras iniciativas, la gestión de los residuos, la reducción de las emisiones contaminantes y la eficiencia hídrica y energética como decisiones específicas para abordar las cuestiones ambientales y el cambio climático; la donación de alimentos a poblaciones vulnerables y la actualización del sistema de vida útil de los productos (como “best before” o “consumir preferentemente antes de”) para reflejar aspectos sociales; o la adopción de mejores prácticas en materia familiar y en cuestiones de diversidad para responder a las demandas de una mejor gobernanza. Asimismo, el estudio determinó las métricas que deben ser utilizadas para medir periódicamente y de manera precisa el desempeño y cumplimiento de cada objetivo, dentro de los cuales pueden señalarse el volumen de residuos y desperdicios generados, las tasas de reciclaje y adopción del “best before”, la cantidad total de emisiones contaminantes, el consumo total de agua y energía eléctrica, la existencia de una estructura de gobernanza, o la representación demográfica en la organización, entre otras. El compromiso del sector con los criterios ESG y la sostenibilidad en sus operaciones resulta claro. Un resultado que no solo puede verse en Brasil a la luz de este estudio, sino que, con matices, es reproducible en la mayoría de los países de la región.

3. ABRAS & KPMG. Guía ESG para el Sector Supermercadista Brasileño. 3era Edición. agosto de 2024. 

Después de todo, como ya se ha destacado en otros artículos, la región conforma uno de los principales conglomerados de empresas comprometidas con el medio ambiente, la biodiversidad y las cuestiones sociales, sobre todo en industrias clave como la alimenticia o la venta al por mayor y menor. No obstante, a pesar de ello, no deben soslayarse las dificultades que el sector enfrenta para alcanzar los objetivos de sostenibilidad, especialmente los relacionados a la complejidad en sus cadenas de suministro, o la falta de capacidades y tecnología; que suelen retrasar sus avances en este sentido y fueron, en ese orden, los tres obstáculos más importantes que los líderes del sector destacaron en la última edición del CEO Outlook de KPMG. En términos generales, puede decirse que la agenda ESG es esencial para el C&R en general y para el Supermercadismo en particular, sobre todo porque cada generación de consumidores ha ido concientizándose más sobre las cuestiones ambientales y sociales que la generación anterior, potenciando por un lado las exigencias hacia las marcas que apoyan y, por el otro, impulsando una integración más natural de la sostenibilidad y los criterios ESG en estos sectores.  

Asimismo, el supermercadismo representa uno de los segmentos más importantes dentro de la industria de consumo y retail, siendo además una pieza fundamental del entramado productivo regional, no solo por su alta participación en el producto agregado y en la generación de empleos, sino también por su capilaridad geográfica y capacidad para llegar directamente a la población. Si bien siempre existirá espacio para la mejora en materia de iniciativas ESG, los estudios anteriores demuestran que el supermercadismo no solo no ha escapado a esta nueva realidad, sino que la ha abrazado y concebido como parte central de su evolución. Pero, sobre todo, pone en evidencia a otros sectores, que bien podrían tomar estas iniciativas como ejemplo para hacer realidad sus objetivos de sostenibilidad.

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