Los últimos diez años han traído innovaciones sin precedentes para el sector bancario – desde nuevos canales y propuestas para los clientes hasta nuevas tecnologías de back office y automatización.

Sin embargo, de acuerdo a los CEOs de los bancos en todo el mundo, el ritmo de la disrupción tecnológica no sólo comienza a tomar impulso. En una reciente encuesta realizada por KPMG International, casi la mitad de los CEOs de los bancos que fueron encuestados declararon que esperan una disrupción mayor en el sector dentro de los próximos tres años, como resultado de la innovación tecnológica.

La buena noticia es que la mayoría de estos CEOs parece tener una buena actitud respecto a la innovación. Más de dos tercios de los encuestados dicen ver la disrupción tecnológica más como una oportunidad que una amenaza. Y un 63% declara que ya han comenzado con la disrupción en el sector de manera activa.

Quizás, y no de forma sorprendente, los CEOs de los bancos también dicen tener grandes planes para apoyar e incentivar la innovación durante los años venideros. Cerca de siete de cada diez de los 120 CEOs encuestados declaran tener planes para incrementar la inversión en su infraestructura digital, tecnologías emergentes y productos y servicios innovadores.

Los CEOs también declararon estar invirtiendo en una amplia gama de tecnologías, impulsadas por el análisis y la automatización. La mayor parte de ellos (81%) planea invertir en datos y análisis (D&A) dentro de los próximos tres años, mientras que el 72% sugiere que aumentarían la inversión en el internet de las cosas, y el 66% dice que la inversión irá a tecnologías cognitivas.

Nuestra encuesta también indica que los CEOs de los bancos están cada vez más preocupados respecto a si sus organizaciones están listas o no para este tipo de innovación o (más importante) para los grandes cambios en las operaciones y en los modelos de negocios que vienen.

Los encuestados notan una amplia gama de barreras para la innovación; la complejidad de implementar nuevas tecnologías es el primer obstáculo en el ranking, mientras que las preocupaciones por la disponibilidad de presupuesto quedaron en segundo lugar. Muchos de ellos también están preocupados respecto a la atracción del talento y la experiencia necesaria para apoyar la comercialización de las tecnologías emergentes, lo que sólo amplifica el desafío de la transformación digital.

Estos datos sugieren que, de aquí en adelante, establecer el camino correcto del cambio será un diferenciador muy importante. Consideremos, por ejemplo, el hecho de que un 43% de los CEOs de los bancos que respondieron nuestra encuesta admitieron que están preocupados sobre la calidad de sus capacidades sensoriales y su habilidad de responder a una disrupción rápida. O que la mitad declara que están preocupados por la integridad de los datos en los que basarán su decisión.

Nuestra experiencia sugiere que los bancos deberán hacer frente a estos desafíos rápidamente si esperan participar en el siguiente nivel de innovación. De hecho, mientras que los últimos diez años entregaron cantidades masivas de innovación y cambio, es cada vez más claro que los próximos diez años traigan consigo un nuevo nivel de innovación, caracterizado por el desarrollo de nuevos negocios y modelos operativos.

Esto requerirá que los bancos desarrollen y aseguren de manera significativa sus distintas habilidades y capacidades, no sólo para gestionar los nuevos modelos operativos, sino que también para sustentar un programa de innovación más activo. Necesitarán estar más conscientes y ser más ágiles a la hora de responder a los cambios en el mercado. Y deberán confiar en sus datos si quieren lograr cambios fundamentales en sus negocios subyacentes y modelos operativos.

Nuestra experiencia trabajando con bancos globales sugiere que existen cinco puntos clave que los líderes hacen de forma diferente para impulsar la innovación:

1. Están mejorando sus habilidades. Los bancos líderes están al frente de una guerra mundial de talentos, apartándose de su escenario tradicional de contrataciones para identificar y asegurar una variedad de nuevas habilidades y capacidades. Al mismo tiempo, también están formando sociedades inteligentes fuera de las organizaciones, las cuales atraen una gran variedad de distintas habilidades a la mesa.

2. Se están enfocando en el cliente. Los bancos líderes reconocen que el próximo nivel de innovación está centrado en el cliente más que en la competencia. Están trabajando para romper los núcleos de sus negocios para así poder exponer una sola visión de sus clientes y permitir la obtención de perspectivas más profundas de las necesidades, deseos y expectativas de sus clientes.

3. La innovación es una prioridad organizacional. Los bancos líderes creen que la innovación es una responsabilidad compartida, una prioridad a nivel de directorio y un hecho imperativo para la organización. La estrategia de innovación está impulsada por la oficina del CEO en lugar de la del CTO y se apoya en trabajadores y equipos comprometidos.

4. Están desbloqueando sus datos. Los bancos líderes comprenden el valor de los datos compartidos, accesibles y confiables y es por esto que priorizan la habilitación de la nube y una arquitectura abierta siempre que es posible. Aquellos que se defienden en contra del rol de las plataformas reconocen la urgente priorización de este tema más que otros.

5. Se están asociando con partes no convencionales. Como informamos en Forjando el futuro, la mayoría de los bancos ahora trabajan con empresas emergentes de fintech y grandes empresas tecnológicas. Pero las asociaciones con partes menos convencionales, tales como grandes cadenas de alimentos, proveedores de servicios empresariales o incluso otros bancos, se están transforman en un espacio común para inspirar, comercializar y mantener la innovación en toda la organización.

Los CEOs del sector bancario realmente piensan que su organización puede contribuir de manera activa a la disrupción del sector. Y están dispuestos a invertir y utilizar recursos a fin de alcanzar una innovación más profunda. Pero también reconocen que el siguiente paso será uno grande.

Debido a que la disrupción de los negocios tradicionales y de los modelos operativos ya están sobre el sector bancario, los líderes de los bancos en todo el mundo necesitan considerar qué se necesitará para alcanzar el siguiente nivel de innovación.