El panorama está cambiando rápidamente a medida que el sector del transporte público busca dejar atrás el impacto de COVID-19 y abrazar audazmente el futuro. El modelo tradicional de prestación de servicios de transporte público, proporcionado tradicionalmente por organismos altamente subvencionados que operan modos de transporte discretos/en silos, está siendo desafiado como nunca antes. Los nuevos participantes en el mercado están cambiando la ecuación de la última milla a través de servicios mejorados y nuevas ofertas convenientes. Las prioridades están cambiando a medida que los tomadores de decisiones escuchan la voz de sus constituyentes y miran más allá de la operación de la infraestructura de transporte, las flotas y la fuerza laboral para considerar plenamente las ventajas de un ecosistema conectado del siglo 21.

KPMG International, en una encuesta realizada por Forrester Consulting, encuestó a 483 líderes de organizaciones de transporte público de todo el mundo para comprender sus perspectivas sobre el futuro del sector. El informe explora el potencial que tiene un sistema de transporte público conectado para forjar poderosos modelos comerciales y de entrega en toda la empresa que pueden impulsar una excelente experiencia del cliente al tiempo que mejoran la eficiencia y contribuyen al futuro próspero que todos queremos ver.

Explore las señales de cambio a continuación y descargue el informe completo para ver lo que los líderes de todo el mundo están prediciendo sobre el futuro del transporte público.

Explore las seis señales de cambio


Las expectativas de los clientes y de la comunidad están cambiando. Demandan servicios digitales, personalizados a sus necesidades y preferencias, accesibles y equitativos.



El transporte público es un facilitador clave del crecimiento económico sostenible y la igualdad de oportunidades. Los líderes deben equilibrar la necesidad de inversión con la sostenibilidad financiera a largo plazo del estado.


La necesidad de descarbonizar y minimizar la contaminación se está convirtiendo en un elemento central del transporte público y la planificación del lugar para el futuro. La sostenibilidad ambiental se está convirtiendo en un área de enfoque clave de la presentación de informes y refleja la demanda de una mayor transparencia.



Las tecnologías digitales emergentes están alterando el status quo. La nueva tecnología operativa se encuentra en las primeras fases de remodelación de las redes y se espera que se vincule con tecnologías de clientes, activos y empresas que mejoren las operaciones y la toma de decisiones en torno a los servicios.



La movilidad como servicio y los vehículos autónomos tienen el potencial de ser competitivos en costos con los servicios de transporte público. Esto introduce un nuevo nivel de competencia por el número de pasajeros y presenta la necesidad de que los servicios de transporte público "atraigan" a los clientes con el fin de mantener la sostenibilidad financiera al tiempo que ofrecen resultados ambientales y sociales.



La velocidad de la innovación excede cada vez más la velocidad a la que los sistemas regulatorios tradicionales pueden adaptarse, lo que presenta un desafío inherente para los reguladores del transporte público. Los marcos regulatorios deberían ser más dinámicos para responder a los modos emergentes y a los nuevos actores del sector privado, ayudando a garantizar experiencias seguras, controladas y sin fisuras.


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