En los últimos 18 meses, el mundo se ha acelerado y no solo como consecuencia del impulso que ha experimentado la digitalización. En las economías más avanzadas, la sociedad se muestra más reivindicativa, especialmente en el ámbito de la lucha contra la desigualdad. Según los resultados de este estudio, los CEO son conscientes de esta realidad y reconocen que sus empresas tienen la responsabilidad de generar valor no solo para sus accionistas, sino también para el conjunto de la sociedad.
En España, el 82% de los primeros ejecutivos asegura que la pandemia ha impulsado a orientar sus programas de ESG hacia el componente social, en línea con lo que ocurre en el conjunto de los 11 mercados en los que se ha realizado esta encuesta (81%).
No obstante, existe cierto desequilibrio entre la responsabilidad que los CEO asumen a la hora de promover el progreso social y su capacidad para satisfacer las expectativas en un área tan crítica como la diversidad. En España, mientras que un 78% de los primeros ejecutivos apunta a que su responsabilidad personal a la hora de afrontar los retos sociales se incrementará, un 46% prevé que, ante el rápido crecimiento que están experimentando las demandas de sus grupos de interés en aspectos como la diversidad, la inclusión y la igualdad, podría tener dificultades para cumplir con las expectativas.
Estos datos presentan diferencias significativas con los recogidos en el ámbito global, donde el porcentaje de los CEO que prevén tener una mayor responsabilidad es siete puntos inferior y el de aquellos que anticipan que tendrán dificultades para cumplir con las expectativas de diversidad de sus grupos de interés supera en 10 puntos al registrado en España. Por tanto, el desequilibrio que se apuntaba anteriormente es sensiblemente mayor en el ámbito global que en el nacional.
Para afrontar los retos relacionados con la diversidad, la igualdad y la inclusión en la empresa, es preciso que los CEO ejerzan una escucha activa con el fin de identificar los aspectos que más preocupan a sus empleados. Asimismo, será necesario establecer objetivos claros y medibles que permitan calcular la evolución de la compañía en esos ámbitos.